Estudios recientes realizados en Estados Unidos de América confirman las sospechas arrojadas por investigaciones realizadas con anterioridad, en las cuales se presumía que la ingesta diaria de dosis elevadas de cafeína afectan grave e irreparablemente el período del embarazo, llegando a provocar la pérdida del feto a través de abortos espontáneos.
Según investigadores del American Journal of Obstetrics and Gynecology, las mujeres embarazadas deben evitar consumir cualquier bebida que posea cafeína en dosis considerables, aproximadamente hasta los 5 meses de gestación, con el propósito de preservar la salud, el bienestar y la seguridad tanto del feto como de la madre, para que así ambos se mantengan en perfectas condiciones hasta el momento del nacimiento.
Cifras arrojadas por estudios previos indican que una ingesta diaria de 3 tazas de alguna bebida que contenga cafeína, o lo que es igual a 300 mg. de la misma en dosis constantes son factores de alto riesgo para las mujeres embarazads con menos de 5 meses de gestación; las cuales, están mucho más propesas a sufrir abortos espontáneos en comparación con aquellas que evitan la ingesta de dicha sustancia.
Es tan cierto el vínculo entre la cafeína y la pérdida del bebé, que el mismo organismo de una mujer en cinta se encarga de luchar en contra del consumo de esta, prooduciendo de manera natural nauseas y vómitos matinales que generen el repudio de dichas bebidas, las cuales generalmente son consumidas a primera hora de la mañana.
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